Como profesional, siempre he valorado las herramientas simples, eficaces y transparentes, que cumplen objetivos sin añadir complejidades innecesarias ni esconder intenciones comerciales.
Blogger, desde su lanzamiento, ha sido una de estas herramientas: gratuita, fácil de usar y accesible para todos. Sin embargo, su desfase tecnológico, la falta de claridad sobre su futuro y oportunidades no explotadas han puesto a la plataforma bajo una sombra de incertidumbre.
Uno de los puntos más críticos de Blogger es su incapacidad para adaptarse a las demandas modernas del SEO y la experiencia de usuario. Su configuración para dispositivos móviles, gestionada a través del parámetro ?m=1, refleja un enfoque anticuado que Googlebot y Search Console penalizan, considerando las páginas como duplicadas o no completamente adaptadas. Esto no solo afecta la visibilidad de los blogs, sino que también influye directamente en su monetización.
Hace un año, Google AdSense introdujo cambios que complicaron la integración con Blogger. La monetización, que alguna vez fue uno de sus puntos fuertes, se ha vuelto más difícil en comparación con plataformas como WordPress.com, que permite opciones más flexibles y modernas.
Blogger sigue destacando por sus ventajas: gratuidad, simplicidad y una integración fluida con el ecosistema de Google. Sin embargo, existe un potencial que nunca ha sido explorado por completo: la vinculación de un dominio personalizado de forma transparente y sin coste alguno. Esta funcionalidad, si se implementara adecuadamente, permitiría a los usuarios fortalecer la identidad de sus blogs sin complicaciones técnicas ni inversiones económicas. Es una oportunidad perdida que podría haber hecho de Blogger un estándar para proyectos personales y profesionales.
Sin claridad sobre sus planes, los blogs alojados en Blogger corren el riesgo de quedar desindexados o incluso desaparecer, como ha ocurrido con otros servicios de Google. Es (muy) probable (mucho) que herramientas como Google Gemini utilicen el contenido acumulado en Blogger (que son millones de páginas), aprovechando años de creación de valor por parte de pequeños creadores (que en muchos casos eran expertos en su área temática y creaban contenido de alto nivel), sin retribuirlos ni promoverlos. Esto penaliza aún más a los independientes mientras favorece a los grandes medios que a menudo han replicado sus contenidos de forma descarada y desvergonzada.
Los cambios en las políticas de indexación y monetización de Google han afectado desproporcionadamente a los pequeños creadores, de manera general, pero muy en particular a los que quedan en activo en Blogger.
Mientras los grandes medios mantienen su posicionamiento, los blogs en Blogger enfrentan dificultades para competir debido a su configuración anticuada. Además, al desindexar blogs por problemas técnicos de adaptabilidad, se les condena a la invisibilidad en buscadores, dificultando aún más la monetización y reduciendo su impacto. Agravando en muchos casos situaciones de discriminación personales. Mucho alardear de las políticas DEI en el caso de Google pero en la práctica se actúa justo al contrario. Esa es la realidad que muy pocas parecen o quieren o son capaces de ver.
Es inmoral que Google utilice contenido existente para sus propias iniciativas, como Gemini, sin reconocer ni apoyar a los creadores originales. Esto contradice el espíritu original de Blogger como herramienta de empoderamiento para pequeños creadores y empresas. Además, esta misma sencillez da acceso a la posibilidad de tener voz para muchas personas a las que enfrentarse al backend de un WordPress les supone ya de por sí un enorme freno por una deficiente alfabetización tecnológica.
Google debe ser claro sobre sus intenciones con Blogger. Si la plataforma va a ser descontinuada o modificada significativamente, es esencial que los usuarios sean informados con antelación para que puedan migrar sus proyectos y no pierdan años de trabajo.
Además, es necesario que se actualice Blogger con mejoras clave, como plantillas optimizadas para móviles y la posibilidad de vincular dominios personalizados de manera gratuita y sin complicaciones.
Blogger es un ejemplo de cómo una herramienta simple y bien diseñada puede empoderar a los creadores. Pero su futuro incierto y la falta de inversión en mejoras tecnológicas amenazan con relegarlo al olvido.
Google tiene la responsabilidad de ser transparente con sus usuarios y valorar el contenido que ha sido clave para el éxito de su ecosistema. Penalizar a los pequeños creadores en favor de los grandes medios no solo es injusto, sino que traiciona los principios que hicieron de Blogger (y de Google) una plataforma única.
Si Google apuesta por renovar Blogger, aún tiene el potencial de ser una herramienta clave en el panorama digital.
Estoy absolutamente convencido.
Tiene la oportunidad de tener una herramienta que de voz a los silenciados.