Su propia sala de exposición virtual: EstherÓleosYFlores

Esta historia es de un proyecto personal.
Trayectoria profesional: Qué hice o LinkedIn.

ÉstherÓleosyFlores.com: el espacio de una artista amateur, autora de óleos que se centran en la naturaleza, pero también algunos acrílicos, carboncillos o acuarelas y que también toca la fantasía o la temática tradicional oriental.

Esther Álvarez es mi pareja. Mi pareja tenía (y tiene) una pareja que hace webs. Mi pareja pintaba cuadros (y los está volviendo a pintar). Mi pareja necesitaba (y vuelve a necesitar) un lugar donde exponerlos.

Porque otra cosa no tiene el arte pero elitista lo es un rato. Yo creo que por una cuestión muy simple. Hay mucha oferta y, no es que haya poca demanda, lo que hay es poca demanda dispuesta a soltar euros en forma de 3, 4 ó 5 cifras.

Así que las broncas por ganar espacio y que eso dé una oportunidad a los y las artistas a vivir de sus creaciones no son pocas. Algo como lo que pasa en la fotografía. O en el diseño. Y en tantas otras profesiones vinculadas con la creatividad.

Recuerdo que en una ocasión me di un salto por un par de salas de San Cristóbal de La Laguna, nuestro municipio, en Tenerife. Un núcleo urbano que no pasa de pueblo y cuya municipalidad ronda las casi 160.000 almas con un crecimiento más lento que la media regional desde 2005 pero habiendo pasado desde los 20.000 en la primera década del siglo XX hasta los que nos apretuñamos actualmente en esta zona de España.

Pues bien, ambas salas me dijeron que tururú que te vi. Que no trabajaban con artistas amateurs (como si la mayoría de artistas que hoy convierten en oro todo lo que tocan no hubiesen empezado siendo simples aficionados).

Y no es que mi artista tenga una gran producción o que su producción haya sido homogénea. En sus creaciones se ve su progreso. Y la habilidad para el manejo del color y para crear espacio y tridimensionalidad allí donde el ojo solo debería ver un plano formado por X e Y.

Web realizada en Blogger.com, de la que archive.org no conserva sus imágenes, lamentablemente, pero son recuperables, eso sí.

Consciente que no conseguiría un espacio en el que mostrar su obra, porque no hay nada más motivador para una artista que someter a escrutinio sus creaciones, decidí que Internet sería su sala de exposiciones.

Y su sala de venta de obras.

Así que ni corto ni perezoso opté por mi vía sencilla, rápida y económica: Blogger con dominio propio.

La web la creamos a principios de 2013, poco antes de abandonar en verano el intento de proyecto de empresa que era NexBoreal (bajo el paraguas de Frisa Europa SL) -algo sobre lo que aún no he escrito-.

Fotografiamos todos sus óleos, que es su principal obra, junto a otros pinitos en acuarelas, acrílicos o pasteles. Desde los primeros, mientras aprendía en ésta o aquella academia, hasta los más recientes hasta el momento.

Y mantuvimos esa web hasta 2015. Año en la que perecieron por agotamiento personal (mío) ésta y todas las demás que tenía entre manos.

Más por una cuestión económica, de minimizar al extremo los gastos en proyectos, ideas y apuestas, dejando así que lo poco que entraba en casa fuera para la economía familiar.

Pero la verdad es que me arrepiento de haberla hecho desaparecer. Como me arrepiento de haber hecho desaparecer el resto de mis proyectos.

Porque al menos hoy tendría un buen grupo de dominios con autoridad por antigüedad, incluso si hubiera dejado de escribir en todas esas páginas.

Además hemos perdido 6 años de oportunidad para vender alguna de sus obras.

Y es algo que voy a recuperar, sí o sí.

Porque ninguna obra debería acabar en un trastero, cajón o armario, olvidada y abandonada. Siempre habrá quien empatice con la artista y ame lo que ésta le ha regalado para sus ojos.

Lo que me movía era el amor y el respeto. Pero sobre todo revelarme contra un sistema que discrimina a artistas mujeres cuya prioridad en la vida ha tenido que ser trabajar y solventar las necesidades básicas de la existencia, no pudiendo ejercer a tiempo completo su pasión.

El óleo. Siempre ha querido pintar óleos. Y siempre se enfrentó a sus maestros y maestras porque querían que hiciera acrílicos o pastel. Pero ella ha querido hacer óleo.

La técnica del óleo no es como la técnica de la acuarela o del acrílico o del pastel. El óleo requiere paciencia y visión a largo plazo.

En el acrílico pintas y pintas y pintas. Es casi como hacer una foto. La idea que tienes en mente se refleja sobre el lienzo en un no parar desenfrenado. Al igual que con el pastel es fácil corregir o cambiar el rumbo de una obra. La acuarela es más mística, es un baile de colores y transparencias que crean formas.

Pero el óleo no es nada de eso.

Requiere visión porque has de ir pintando partes que vas a tener que ir dejando secar para luego seguir pintando sobre lo ya seco, hasta construir una forma.

Requiere paciencia porque has de esperar entre capa y capa, entre zona y zona. La obra puede mutar con el tiempo pero esa mutación debe tener sentido, ser como la propia supervivencia de las especies donde solo sobrevive el que tenga la mejor adaptación.

Y luego está, además, el motivo o tema y la técnica.

Para ella, mi pareja, mi compañera, mi amiga, mi todo, pintar con realismo, que no híper realismo (no confundir) la naturaleza y la micro naturaleza en particular, expresando la vida a través del color y la profundidad, es lo que la ha motivado como creadora.

Una vez intenté que su obra viera la luz y pudiera incluso venderla. Por designios de mis fracasos aquello desapareció.

Prometo que volverá.

Y los precios de sus obras van a estar a la altura de su exclusividad.



Si tienes curiosidad:
archive.org/web/*/estheroleosyflores.com


Primera versión del texto del miércoles 6 de abril de 2024. Sin revisión posterior.