Supongamos que te has dado de alta en el RETA, el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos, y aprovecho para poner lo de «trabajadores» en negrita. Porque aunque UGT y CCOO dice que somos empresari@s, lo que somos realmente es trabajadores por cuenta propia.
Es decir, trabajadores que se autofinancian su propio trabajo.
Pero trabajadores.
Exactamente, en octubre de 2023, tres millones trescientos cuarenta y cuatro mil setecientos setenta y un almas dadas de alta en el RETA español. Algunos cientos de miles más que en 2022. De estos, 2.027.994 (abril de 2023) son personas físicas. Es decir, no pertenecen a sociedades ni cooperativas ni otro tipo de entidades societarias. Es decir, 2/3 son pequeños empresarios o freelances. Exactamente, menos del 25% (unos 400.000) tienen una persona a su cargo o más.
Es decir, y siguiendo siempre los datos del ministerio, el perfil mayoritario se dibuja como alguien SIN personas asalariadas de entre 40 y 54 años que lleva más de 5 años con ese perfil y que cotiza la base mínima.
Es decir, freelances.
El freelance es aquella figura laboral en la que el trabajador ejerce su profesión por cuenta propia y no trabaja para otra persona o empresa.
Economipedia
Cuánto gana un freelance e España
Según la Seguridad Social y según datos publicados en 2019, hace ya 5 años, un trabajador autónomo gana de media, mayoritariamente, el SMI o menos.
- Un 15% tuvo rendimientos netos anuales menores a los 3.150 euros (¡menos de 600 euros mensuales!).
- Un 46% tenían rendimientos inferiores al actual Salario Mínimo Interprofesional (casi la mitad).
- Un 34% se encontraban en el tramo de los 12.600 euros anuales a los 30.000 euros anuales.
- Y solo un 19% de las personas físicas autónomas tuvieron ganancias netas de más de 30.000 euros.
¡Ojo! Que la Seguridad Social habla de rendimientos netos, no de facturación. Es decir, lo que te queda cuando has descontado gastos. Lo que podríamos llamar «el salario del autónomo».
Este dato nos puede servir como punto de partida y vamos a suponer, no que tus ganancias son 30.000 euros anuales sino que facturas 30.000 euros anuales y no tienes gastos, lo que es más habitual, tus gastos habituales como dietas o combustible o coche no te los dejan descontar porque plantean dudas a Hacienda -una excusa para aumentar tu rango de beneficio y, por lo tanto, los impuestos que pagas-.
¿Está todo claro? Como autónom@ facturas 30.000 euros al año.
Vamos allá, a por la desgarradora realidad.
Cuánto paga un freelance en España
Antes que nada, vamos a ver que supone, de media, 30.000 euros al año de facturación, mes a mes.
2.500€ / mensuales
Bien, supongamos que eres freelance prestador de servicios sin gastos más allá de tu número de teléfono, algunas dietas y combustible. Gastos que no pocas veces no vas a poder desgravar como tales. Así que en la práctica no cuentan.
Salvo servicios exentos, como la docencia pero solo de cursos de oferta pública -los del SEPE- deberás incluir tu IGIC (7% por lo general) o tu IVA (21% por lo general).
Es decir, y para no complicarlo, supongamos que la base son los 2.500 euros al mes, pero tú vas a facturar esos 2.500 + los impuestos:
2.675€ / mes / Canarias
3.025€ / mes / Península
Suena bien, ¿verdad? Pues ten cuidado porque has cobrado un dinero (175€ en Canarias o la escandalosa cantidad de 525€ en Península) que no es tuyo y que deberás reservar para abonar, a su vez, al fisco, en cada trimestral.
Un grave problema de muchos autónomos o autónomas es que usan ese dinero en su caja circulante y cuando toca pagar lo que has cobrado (porque has ejercido de recaudador obligatoriamente) no lo tienes disponible. Y entonces toca pedir fraccionamientos y que te los denieguen y que pases a ser un deudor y que se te complique la vida mucho. Pero mucho, muchísimo.
Cuando facturas por tus servicios, salvo excepciones -no recuerdo ninguna- debes de incluir una retención del 15% en tu factura que se lo queda la empresa y ésta, a su vez, se lo paga a Hacienda en sus trimestrales junto al IRPF que ha retenido a trabajadores en sus nóminas.
Es decir, que ese mes vas a cobrar un dinero que deberías guardar para Hacienda, pero además tu cliente te va a retener un dinero, también para el Estado. Forma parte del Impuesto sobre la Renta para las Personas Físicas.
Así que lo que vas a cobrar es tu base más los impuestos (IVA o IGIC) y menos la retención (15%).
Si obviamos el IVA o el IGIC, quedan:
2.125€ / mes
Realmente estás cobrando algo más, porque tú recaudas el IGIC o el IVA, pero ese dinero NO deberías gastarlo ni invertirlo sino guardarlo. Cosa que muchas personas no hacen.
Dos mil euracos pueden parecerte mucho, es verdad, pero…
La Seguridad Social.
Que para esos ingresos, porque recuerda que no tienes gastos (sí los tienes, pero te los rechazan), pagas unos 350 a 400 euros al mes. Así que pongamos una media de 375. Por lo que te van quedando:
1.750€ / mes
Insisto, ingresarás más por el IVA o el IGIC pero… guárdalo. No es tuyo.
Así que resumiendo:
- Facturas 2.500 euros.
- Añades 525 euros de IVA encareciendo brutalmente el coste de tus servicios.
- Te retienen 375€ de IRPF (además sería conveniente que guardases otros 100€ todos los meses para cuando hagas la declaración anual, porque no será suficiente ese 15% y te saldrá a pagar unos 1.000 a 3.000 euros más).
- Te ingresan 2.650 euros.
- Guardas esos 525 euros si no quieres tener problemas, así que los apartas.
- Pagas unos 375 euros a la Seguridad Social (que te la pasan sobre el 26 del mes, haya o no haya saldo).
- Y te quedas con 1.750 euros para pagar los gastos de tu actividad y hacer tu vida.
Te dejo a tu que sigas restando los impuestos municipales o autonómicos, más los indirectos, que restes los gastos mínimos que vas a tener y, con lo que queda, que hagas tu vida de ricachón y pomposo autónomo que nada en el dólar.
Cuando termines las cuentas ya me dices algo.
Breve reflexión sobre las ganancias del autónomo
Si eres freelance y prestas servicios, no tienes gastos (ni ataduras contractuales que te claven a un lugar físico) tu mayor beneficio es tu calidad de vida.
Si consigues alcanzar tus objetivos en menos tiempo podrás tener un salario normal, por debajo de la media del salario medio nacional en España, algo por encima del salario mínimo, pero disponiendo de flexibilidad a la hora de hacer tu trabajo, tanto por el momento como por el lugar.
Y bien gestionado eso se convierte en un beneficio gigantesco exento de impuestos y obligaciones al que nadie podrá meterle mano.
Quizás, tal vez, podría ser, el objetivo no está en ganar más sino en tener más tiempo para ti, tus proyectos personales, tu familia, tus hobbies o simplemente para hacer el gandul.
Es tu elección.
Por cierto, el porcentaje del presupuesto público para hospitales, carreteras y educación es deee… chanchanchán… menos al 6%, pero las cifras te las dan en bruto o en relación al Producto Interior Bruto para que parezcan más de lo que realmente es.
