La guerra entre Google, Meta, TikTok… y X

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En el panorama actual de las redes sociales, la competencia por captar y retener usuarios se ha intensificado de manera significativa. Un ejemplo reciente es la noticia de que TikTok ha comenzado a imitar características de Instagram, introduciendo funciones como las Stories para mantener a sus usuarios más tiempo en la plataforma o TikTok Notes que será un calco del Instagram original centrado en imágenes esteáticas.

Este movimiento no es aislado; refleja una tendencia más amplia en la que las grandes empresas tecnológicas luchan por dominar el mercado de las redes sociales, adoptando y adaptando las innovaciones de sus rivales para no quedarse atrás.


Las empresas luchan con nosotr@s en medio

La batalla por el dominio en las redes sociales no es nueva, pero en los últimos años se ha vuelto más feroz y visible. Meta (anteriormente Facebook), Google, X (anteriormente Twitter) y TikTok están en una carrera constante por innovar y atraer a más usuarios.

Esto ha llevado a una especie de imitación constante entre ellas, donde cada plataforma incorpora las características exitosas de sus competidores.

Uno de los ejemplos más claros es la introducción de reels en Instagram, propiedad de Meta. Estos videos cortos y dinámicos son una respuesta directa al éxito de TikTok.

Aunque los reels han sido tremendamente populares, de hecho puede considerarse un éxito, estudios internos de Meta revelaron que, en muchos casos, simplemente han canibalizado el uso de otras funciones de Instagram, como las fotos estáticas, en lugar de atraer a usuarios completamente nuevos. Es decir, copiando a Tiktok y teniendo éxito en el camino, se dieron un tiro en el pie.

Por otro lado, desde la llegada de Elon Musk a X, la plataforma ha experimentado cambios significativos y no solo de nombre. Musk ha implementado nuevas estrategias y funcionalidades con el objetivo de hacerla más rentable.

Estas incluyen desde la incorporación de suscripciones y contenido exclusivo hasta la creación de un sistema de monetización para los creadores de contenido. Sin embargo, estas estrategias también han traído desafíos, como el aumento de la difusión de desinformación y contenido sensible. Es más fácil ahora ver un perfil falso redirigido a OnlyFans que antes, o masivos anuncios de cryptobros, cursos y todo tipo de estafas.

(¡Ojo, que para nada me considero un puritano, no me asusta la foto de una teta! ¡No tengo ningún problema con las tetas! Pero sí que tengo unas cuantas cosas en contra de quienes, mostrando una teta, quieren engañar, estafar y robar. Que son cosas distintas, aunque las pequeñas mentes las confundan.)

La noticia de que TikTok está imitando a Instagram introduciendo sus propias stories es un recordatorio de cómo estas plataformas están en una continua carrera de imitación. TikTok, conocido por sus videos cortos y virales, busca así diversificar su oferta y mantener a los usuarios más tiempo en su aplicación.

Por su parte, Meta no se queda atrás y ha lanzado Threads, su propia versión de Twitter, intentando captar a aquellos usuarios descontentos con los cambios en X, ante el fracaso estrepitoso de la que iba a ser la red social de conservadores y liberales que acogería a todos los huidos y repudiados por la anterior directiva de la empresa, Mastodon.

Threads busca ofrecer una alternativa más segura y menos polémica, aunque aún está por verse si logrará diferenciarse lo suficiente para atraer a un público significativo. Lo cierto es que Meta se caracteriza por un algoritmo tremendamente excluyente que elimina y restringe cualquier cosa mínimamente sensible.

Otro movimiento invisible que ha realizado Meta es la supresión, de poquito a poco, de la gestión de cuentas independientes y la integración de todo su ecosistema en un único gestor de cuentas, aunque aún no tenga muy claro cómo integrar páginas y perfiles, perfiles personales y de empresa, WhatsApp y Messenger, la nueva e inútil Threads e incluso su ecosistema 3D de Meta Quest. Una especie de central de acceso a todo.

(No porque la empresa y Mark Zuckerberg estén alineados con las políticas ESG para atraer nuevos inversores sino porque intentan buscar cero polémica con sus plataformas.)

En esta guerra sin tregua por el control del mercado de las redes sociales, el usuario suele ser el mayor perjudicado. Al final, nos convertimos en una moneda de cambio en forma de tiempo de permanencia en la plataforma, tiempo que estas empresas venden a los anunciantes. Además, perdemos variedad porque todas las redes sociales tienden a asimilarse y a ser exactamente iguales. Ahora X tiene un sistema similar a los reels de Instagram, que imita a su vez a TikTok, borrando casi cualquier elemento diferencial entre las plataformas.

Aunque X se destaca por su mayor respeto a la libertad de expresión y su menor censura, esto también ha provocado que se convierta en un lugar donde se publican estafas, fake news y contenido sensible, lo cual plantea serios retos para los usuarios y para la propia plataforma.


Y dónde está Google

Si me meto mucho con Google en esta web no es por antipatía sino porque soy un fanboy empedernido. Pero no un acólito incondicional. (Lo siento Google, tienes a un usuario que te admira pero que no te reverencia ni te idolatra, es lo que hay.)

La cuestión es que tras el fracaso estrepitoso de Google Plus y el casi abandono de Blogger/BlogSpot, aunque el servicio sigue disponible y activo, no se han visto muchos movimientos en el gigante alrededor del contenido social. Sí que le han dado un cierto matiz social a las reviews en Maps donde se premia a los usuarios por escribir opiniones sobre empresas, incluso aunque mientan y falseen la información, y donde se estimula constantemente a las empresas a existir (de hecho, van a estar, lo quieran o no), aportando un montón de herramientas para prácticamente construir una segunda web.

Pero el gran salto de Google está por llegar y será producto de la fusión de Chrome y el buscador (aún más). Y es que el gigante ha decidido dar un salto propio a su tamaño incorporando Gemini en el buscador y, lo que es más preocupante para los creadores de contenido que usamos Google para generar algunos ingresos, en la SERP de manera prioritaria.

El nuevo Google espera acercarse (y rebasar) a Bing que ya incluye a Copilot en su buscador. Pero espera ir más lejos porque posiblemente los usuarios tengan algo que decir, interactuando con esos resultados o, a su vez, interactuando con las interacciones de otras personas, lo que la acerca a ese enfoque social y de comunidad.

Queda por ver si las IAs van a dar respuesta, como lo hace Copilot, frente a una búsqueda pero sustrayendo tráfico a las webs. O si realmente las webs de contenido se van a ver beneficiadas por ello.

En cualquier caso estos intentos de monopolización del mercado son extremadamente peligrosos porque nos convierte en esclavos de un sistema que hemos convertido en indispensable para nuestro día a día.


¿Y cómo nos protegemos?

Para protegerte de las estrategias comerciales de estas grandes empresas mientras sigues haciendo un uso gratuito de las herramientas, puedes considerar los siguientes consejos.

Sin embargo, esto también pasa por reconocer que poder usar Facebook para conectar con otras personas, Instagram para convertirte en influencer y negociar con las marcas, YouTuber para subir vídeos y ganar dinero con publicidad, Twitter (llámalo X) para insultar, etc… es necesario que las empresas obtengan ingresos de alguna manera, ya que sus ingenieros y trabajadores tienen la mala costumbre de comer. Y los edificios donde residen sus servidores tienen el mal hábito de gastar electricidad y agua.

Si no eres capaz de reconocer eso entonces es que estás instalad@ en una utopía infantil.

Dicho lo cual, cómo defenderte estando en medio de esta batalla:

Ser selectivo con las plataformas que usan: No es necesario estar en todas las redes sociales. Elija aquellas que realmente le aporten valor y que respeten más su privacidad.

Configurar las opciones de privacidad: Asegúrese de revisar y ajustar las configuraciones de privacidad en cada plataforma para limitar la cantidad de datos que comparte.

No utilizar bloqueadores de anuncios: Existen herramientas que pueden reducir la cantidad de publicidad que ve en línea, lo que puede hacer su experiencia de navegación más agradable. Sin embargo, recuerda que las plataformas necesitan generar ingresos para poder existir. Sin ingresos tu perfil de Instagram o tu cuenta de X o tu canal de YouTube o TikTok… desaparecen. O desaparecen los que consumen. Es una molestia a cambio de un servicio gratuito. Promover el bloqueo de anuncios hará que las empresas opten por otro tipo de vías como cobrar por el uso. O cobrar por un uso prioritario o preferente (como ya hace LinkedIn -de Microsoft- o X).

Ser consciente del tiempo de uso: Establezca límites de tiempo para el uso de redes sociales para evitar pasar demasiado tiempo en ellas. Y si bien, al reducir el tiempo de uso y consumo, reduces el tiempo que la plataforma puede vender a los anunciantes, aquí hablamos de algo más importante y es tu salud mental. Estas herramientas no son vitales para sobrevivir. Ya lo hacíamos antes, en el offline. Es obvio. Solo que tu radio de acción era infinitamente más limitado.

Diversificar fuentes de información: No dependa exclusivamente de las redes sociales para obtener noticias e información. Busque fuentes confiables y variadas.

Tener voz propia con tu propio blog o web: Es posible que no sea un consejo al alcance de todas las personas pero creo que hoy, más que nunca, los blogs podrían ser la tabla de salvación para quienes quieren crear y publicar contenido libremente. O incluso, ganar dinero con ello.

(Si bien, en este último consejo, tenemos que tener en cuenta que dependemos del tráfico que nos redirige Google, Bing o las redes sociales. Porque sin tráfico no hay visibilidad y sin visibilidad no hay publicidad de la que ganar dinero.)

En conclusión, la competencia entre Meta, Google, X y TikTok (dado que Microsoft está feliz viviendo en otro mundo con LinkedIn, donde no tiene competencia) por el control del mercado de las redes sociales ha llevado a una homogenización de las características de estas plataformas

Mientras las empresas luchan por nuestra atención, los usuarios deben ser conscientes y proactivos para proteger su privacidad y su tiempo.